Le dijeron que el mundo terminaría pronto y respiró aliviada.
Vería los otros tonos, las otras luces, los otros otros.
Finalmente, de su vida sólo quedaban algunas brasas intocables.
Pronto sabría quién era.
Finalmente, de su vida sólo quedaban algunas brasas intocables.
Pronto sabría quién era.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios